En un escenario global donde la reducción de emisiones y el cambio climático ocupan un papel protagónico, la industria HVAC enfrenta una transformación estratégica. En este contexto, el Tratado de Kigali se presenta como una herramienta clave para acelerar la transición hacia refrigerantes con bajo potencial de calentamiento global (GWP). Para México, como país signatario, este acuerdo marca una ruta clara hacia la modernización de tecnologías, la eficiencia energética y la competitividad internacional.

📜 Antecedentes históricos

El Protocolo de Montreal, firmado en 1987, logró controlar exitosamente el uso de sustancias que agotan la capa de ozono, como los CFCs y HCFCs. Sin embargo, los refrigerantes sustitutos de estos compuestos —los HFCs (como el R‑134a, R‑410A y R‑404A)— si bien no afectan la capa de ozono, tienen un alto GWP, contribuyendo al cambio climático.

Para atender este nuevo reto, en 2016 se firmó la Enmienda de Kigali, como extensión del Protocolo de Montreal. Su objetivo es reducir gradualmente el consumo y producción de HFCs a nivel global, mediante cuotas de control y cronogramas nacionales.

México ratificó esta enmienda en 2022, comprometiéndose a seguir un calendario de reducción escalonada de HFCs, con un objetivo de reducción del 80–85 % para el año 2045.

⚙️ Implicaciones técnicas para la industria HVAC en México

La entrada en vigor del Tratado de Kigali representa un cambio estructural para fabricantes, instaladores, importadores y usuarios finales del sector HVAC en México:

🌿 Beneficios de su implementación para el sector HVAC

1. 🌍 Cumplimiento normativo y acceso a mercados internacionales
   Las empresas mexicanas alineadas al Tratado de Kigali podrán exportar con mayor facilidad a regiones con normativas exigentes (EE.UU., Canadá, Europa).
2. ⚡ Mejora en eficiencia energética
   Muchos refrigerantes alternativos de bajo GWP ofrecen un mejor rendimiento (COP), lo que reduce el consumo eléctrico en viviendas, comercios e industrias.
3. 💼 Impulso a la innovación y profesionalización
   La implementación del tratado promueve el desarrollo de nuevas tecnologías HVAC, la formación técnica especializada y la consolidación de un mercado más competitivo y ambientalmente responsable.

📌 ¿Qué sigue para México?

México ya ha establecido un calendario nacional de reducción de HFCs, respaldado por organismos como la SEMARNAT y la CONUEE. Las próximas etapas incluyen:

• Incentivos a la reconversión tecnológica
• Actualización de normas oficiales mexicanas (NOMs)
• Capacitación de técnicos y operadores
• Programas de fiscalización y trazabilidad de gases refrigerantes

📞 ¿Tu empresa está preparada para esta transición?

El Tratado de Kigali no solo representa una obligación legal, sino una oportunidad estratégica para modernizar procesos, mejorar la eficiencia energética y posicionarse como líder en tecnologías HVAC de bajo impacto ambiental.

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• Genetron 32 (R‑32)
• Sosltice yf (R‑1234yf)
• Solstice 454B (R‑454B)
• Solstice 513A (R‑513A)

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